No es la primera vez que te lo decimos: el frigorÃfico es el único electrodoméstico de casa que está encendido permanentemente. Es el epicentro de la vida en el hogar y no hay dÃa en que al menos una vez no te acerques a echar un vistazo en su interior. ¡Asà que imagina la cantidad de veces que se abre y se cierra en una casa donde viven 3 o 4 personas!
Sometemos al frigorÃfico a mucho ejercicio y, por tanto, debemos corresponderle con el mimo que necesita. Sobre todo, si quieres que su vida útil sea lo más larga y eficiente posible. Para conseguirlo, sólo tienes que llevar un correcto mantenimiento del electrodoméstico y recordar algunos hábitos.
Elige bien el lugar de instalación
¿Has comprado un frigo nuevo? Piensa bien dónde lo vas a instalar. Nosotros te aconsejamos alejarlo de fuentes de calor como el horno o la placa de cocina, pues ese calor extra le harÃa trabajar y consumir más. Además, recuerda dejar 10 cm de distancia entre el frigo y la pared para que pueda circular el aire.
Ordena los alimentos en tu frigorÃfico
Procura organizar adecuadamente los alimentos, de esta manera el frÃo se repartirá de manera equilibrada. Y recuerda no meter comida caliente al frigo, pues subirÃa la temperatura y harÃa que tuviera que trabajar y, por tanto, consumir más.
Limpia tu frigorÃfico
Es imprescindible una limpieza interior y exterior cada 2 meses. Son especialmente importantes las juntas, pues son ellas las que aÃslan el interior del frigorÃfico, manteniéndolo frÃo. Si no están en buen estado pueden producirse escapes, pérdida de temperatura y, por tanto, un mayor consumo de energÃa… ¡y más dinero en la factura! Para limpiar las juntas puedes hacerlo con agua y secarlas después con un paño.
¿Quieres saber un truco para saber si está todo en orden? Cierra la puerta del frigo colocando un billete entre medio. Una vez cerrada, intenta quitarlo. Si te cuesta y notas resistencia, significa que el sellado se mantiene perfecto.
Después es el turno del serpentÃn del condensador. Es normal que a primera vista no caigas en qué es. Pero, ya verás, acércate a la parte trasera de tu frigorÃfico. Ese tubo que se retuerce es el serpentÃn, y se encarga de enfriar el motor, es muy importante para que el frigo mantenga su eficiencia. Cuando el serpentÃn se llena de polvo se reduce su capacidad de trabajo, por lo que te aconsejamos limpiarlo cada dos meses. Pasar un plumero es suficiente.
También debes limpiar con una bayeta con jabón la bandeja de goteo y el orificio de drenaje, que acumula agua, bacterias, restos de comida, etc. Desaparecerán los malos olores y te asegurarás de que los alimentos se conservan de manera más higiénica y segura.
Nivela tu frigorÃfico
Tu frigorÃfico necesita estar en equilibrio para que la puerta se cierre correctamente y quede bien aislado, si no podrÃa producirse una vibración que acabarÃa desgastando el motor. Asà que te recomendamos comprobar si las patas están niveladas. Para ello, utiliza un nivel de carpintero y ajústalas hasta que la burbuja de nivelación quede centrada.
Descongela el congelador de tu frigorÃfico
Si tu frigorÃfico es cÃclico, debes descongelar el congelador cada cierto tiempo. Cuando veas que las paredes están cubiertas por una capa entre 0,5 y 2 cm de hielo, es un buen momento para hacerlo. Y si tu frigo es No Frost, ¡buenas noticias! No tendrás que pasar por el proceso.
Aquellos que tengan frigorÃficos americanos con el caracterÃstico dispensador de hielos, recuerda que debes cambiar el filtro de agua cada seis meses.
¡Ya sabes cómo tener tu frigorÃfico preparado para una larga vida!