5 ventajas de utilizar un lavavajillas

Aunque hace algunos años tener un lavavajillas se considerara casi un lujo, en la actualidad se ha convertido en un electrodoméstico prácticamente imprescindible en cualquier hogar. Gracias a él, es posible “librarse” de una de las tareas del hogar más odiadas, ya que se luce poco y, además, hay que hacerla justo después de comer o cenar, cuando el cuerpo pide reposo y relax. Tener un lavavajillas en la cocina tiene muchas ventajas, en este post te contaremos algunas de las más importantes.

Ahorra agua

¿Eres de los que creen que poner el lavavajillas es un despilfarro de agua? Tenemos que decirte que no es así. No te preocupes, es una creencia muy generalizada, por eso en 2012 el Canal de Isabel II hizo un estudio en el que se  demostró que el gasto de agua de un lavavajillas es una media de 30 litros menos que si se limpian los platos a mano. Sorprendente, ¿verdad?.

En Bosch pensamos tanto en tu bolsillo como en el medio ambiente, por eso nuestros lavavajillas cuentan con tecnología que te ayuda a ahorra todavía más agua.

El sensor AquaSensor, por ejemplo, garantiza unos resultados perfectos porque ajusta la cantidad de agua y presión automáticamente, en función del grado de suciedad que detecta.

Y la tecnología ActiveWater ahorra agua y energía con una mejor distribución y circulación del agua, una tecnología de filtrado optimizada y un calentamiento más rápido. En resumen: tu lavavajillas será mucho más eficiente que lavar a mano.

Consume menos energía

Hablando de eficiencia, un lavavajillas también va a ayudarte a ahorrar electricidad. Según el estudio del que te hablábamos antes, si se utiliza cinco días a la semana a máxima capacidad, el ahorro relativo supera los 40 euros anuales. Eso sí, para asegurarte de que te ayuda a gastar menos energía, además de intentar llenarlo antes de ponerlo en marcha, busca un lavavajillas con una etiqueta energética A+++, que garantiza el menor consumo. Aunque cueste un poco más, a largo plazo ahorrarás en luz durante toda su vida útil.

Además, el motor EcoSilence de los lavavajillas Bosch combina un bajo consumo energético con el mínimo ruido, ya que prescinde de las tradicionales escobillas de grafito.

Ahorra tiempo

Si calculas el tiempo que pasas fregando a mano los platos, secándolos…y lo comparas con lo que cuesta meterlos en el lavavajillas verás que la diferencia es evidente.

Los lavavajillas Bosch cuentan con programas rápidos que ahorran todavía más tiempo y te permitirán tener la vajilla lista en solo 30 minutos. Y la función VarioSpeed, que puedes aplicar a todos los programas excepto prelavado y rápido, lava y seca tus platos hasta tres veces más rápido que un lavavajillas convencional. ¡Imagina lo que podrás hacer con todo el tiempo que vas a ahorrar!

Acaba con los gérmenes

Si quieres asegurarte de que se eliminan todas las bacterias de tus platos y cubiertos, nada mejor que las altas temperaturas a las que funciona un lavavajillas. Y, si necesitas un extra de higiene en utensilios como biberones o tablas de cortar, nuestros lavavajillas te ayudan a conseguirlo con su función HigienePlus. Gracias a ella, la temperatura aumenta hasta los 70º C durante el aclarado final, que se alarga hasta los 10 minutos, garantizando la máxima higiene.

¿Quieres saber más? Mira este vídeo:

https://www.youtube.com/watch?v=NrLEpcinq_0

Evita discusiones

Seguro que reconoces la escena: tras terminar la comida toca decidir quién se encarga de lavar los platos. Habitualmente se recurre a la regla de “yo cocino, tú friegas”, aunque a veces no se pueden evitar las discusiones sobre el tema.

Un lavavajillas pone fin a ese problema, porque el esfuerzo para ponerlo es mínimo. Así podrás disfrutar de las sobremesas sin sentirte mal por tener un montón de platos en el fregadero.

Ahora que ya conoces las ventajas de un lavavajillas toca elegir cuál necesitas. Y no, el espacio no es un problema gracias a todas las opciones que te ofrecemos en Bosch.

Los lavavajillas de libre instalación podrás colocarlos en el lugar que prefieras de tu cocina, para darle tu toque personal. Podrás elegir entre modelos de 60 y 45 centímetros, solo necesitas un enchufe, un desagüe y una toma de agua para empezar a disfrutar de sus ventajas.

Si te pierde el diseño, quizá prefieras un lavavajillas integrable, que podrás colocar bajo la encimera, o en altura. Son discretos y se adaptan a los muebles de tu hogar consiguiendo un espacio diáfano y minimalista, y también puedes elegir entre 60 y 45 centímetros.

Y aunque en tu cocina no haya mucho espacio no vas a tener que prescindir del lavavajillas gracias a nuestro modelo compacto que podrás colocar sobre la encimera. Es pequeño, flexible y eficiente.

Como ves, tienes muchísimas opciones para equipar tu cocina con un lavavajillas Bosch. ¿Ya sabes con cuál te quedas? ¿Alguna duda? Cuéntanoslo en los comentarios.