#TrucosBosch: cómo caramelizar

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22/04/2018
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Somos golosos por naturaleza. Nuestro cuerpo reacciona cuando ve chocolate o algún postre dulce… como el caramelo. Caramelizar es una de esas técnicas culinarias de vanguardia que puedes hacer en casa y que te permite descubrir un sabor diferente de los alimentos, especialmente de frutas y verduras. Para hacerlo sólo necesitas poner en marcha tu placa de inducción. ¡Descubre los trucos de #cocinaconBosch!

Como caramelizar

Una comida no es redonda sin el postre. Imagina coger un alimento rico en nutrientes, como la fruta o los frutos secos, y transformarlo en algo diferente. Las almendras o fresas caramelizadas, por ejemplo, pondrán un punto final dulce y sabroso a tu menú.

Caramelizar un alimento es sencillo: sólo hay que mezclar agua y azúcar en un recipiente y saltear en una sartén caliente. Lo más complicado es evitar que la mezcla se sobrecaliente. Para evitarlo es necesario mantener una temperatura constante durante la cocción. ¿Sabes cómo conseguirlo? En nuestras placas de inducción puedes activar el control de temperatura del aceite en su nivel 1. De esta forma, evitarás que la mezcla de agua y azúcar en la sartén se queme y sea inservible. ¡Tu caramelizado será perfecto!

Placa de induccion Bosch

 

Esto sucede porque para caramelizar es necesario exponer el azúcar o algún otro tipo de carbohidrato a temperaturas muy elevadas. Es la forma de conseguir ese característico color marrón brillante que envuelve a diversas recetas, y que potencia su aroma y sus sabores. Se produce lo que se llama “reacción de Maillard”, un conjunto de reacciones químicas que tiene lugar cuando cocinamos los alimentos. Es responsable, por ejemplo, de la costra cobriza de la carne asada o del color tostado del pan al horno. Recuerda que hacer pan en casa es muy sencillo gracias a la función Fermentar de nuestros hornos, con la que conseguirás una masa perfecta. Después sólo tendrás que seleccionar la receta automática de pan en el asistente de cocinado Assist, o programarlo con los ajustes deseados y combinados con vapor.

Puedes caramelizar frutas jugosas (como la manzana, el plátano o la pera), frutos secos (como las nueces o las almendras), alitas de pollo o de cerdo, cebolla… ¡E incluso zanahorias! Una forma perfecta de atraer a los más pequeños para que tomen alimentos que muchas veces no les apetecen.

Eso sí, acuérdate de limpiar tu placa de inducción correctamente. Por suerte, como sólo produce calor sobre la zona en la que está el recipiente, nunca encontrarás un resto incrustado imposible de quitar.

¡Disfruta de tu receta caramelizada!

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